No soy mucho de escribir en esta sección, pero viendo que el foro está un poquito de capa caída, porque cada vez se escribe menos, voy a hacer mi pequeña contribución…; no sé si servirá de mucho, pero al menos se ha intentado… Al final del tocho, hay un enlace a Youtube, para el que quiera ver la "video-crónica"

Al lío: el último fin de semana del pasado mes de septiembre, junto a dos amigos ajenos al foro, teníamos intención de hacer una salida de esas que molan: salir el sábado tempranito, rodar todo el día (lo máximo posible por campo) y pernoctar “allá donde cayésemos”…; la idea para el domingo era madrugar y continuar haciendo off toda la mañana, fijando el “timbre del recreo” tras la sobremesa, para entonces emprender el regreso a casa por la autovía de rigor.
Días antes de la pequeña aventura tocaba decidir hacia dónde ir. Esta tarea fue fácil, y lo fue gracias a todos esos compañeros que se curran las rutas y las suben a Wikiloc para goce del resto del personal. Gracias infinitas a todos ellos.

Después de haber seguido varias rutas del compañero “Desjoma” (a este hombre hay que hacerle un monumento), la tarea no entrañó dificultad alguna, y tras un intercambio de tan solo un par de mensajes ya habíamos consensuado el track: íbamos a seguir la ruta Madrid-S. Sebastián de dicho forero.
Los días previos dedicamos algunos ratos a preparar la excursión: comprobar por donde discurría, hacer alguna pequeña variación para pisar lo negro lo menos posible, tener una ligera idea de la situación de las gasolineras, y hacer una pequeña estimación de que parte de la ruta podríamos completar, pues teníamos claro que con tan poco tiempo no podríamos llegar al destino final, pero eso no nos importaba. Para nada.
El tramo que discurre por Soria tenía una pinta increíble y nos dábamos por satisfechos si llegábamos hasta La Rioja. Algo que si era más que factible si no sufríamos imprevistos.
Pero, ¿qué hay más imprevisible que la meteo?, y tras varias semanas de bonanza climatológica, justo para nuestro fin se semana, marcado en chillones colores en nuestro calendario, las previsiones eran poco alentadoras: bajada drástica de las temperaturas y lluvias para todo el tercio norte de la península… Menudo chasco.
No obstante estábamos emperrados en nuestra idea, y pecando de Ilusos, nos decíamos a nosotros mismos: "con tacos, petates impermeables en nuestras gordas y un buen chubasquero se llega al fin del mundo…"
Pero la fecha se acercaba y las previsiones no solo se cumplían, sino que empeoraban sobremanera…: el viernes, un solo día antes de nuestra salida, pudimos comprobar que en la Sierra de Cameros, que es una de las zonas destacables del track y a la que le teníamos muchas ganas, no solo estaba cayendo un aguacero de los buenos, sino que además las nubes bajas no permitían ver más allá de un par de metros. Esto era extensible a casi toda la provincia de Soria y pintaba así para gran parte del fin de semana, como finalmente ocurrió...
Ya nos veremos las caras en otro momento, Laguna Negra.
Pues nada, a solo unas pocas horas de la salida tocaba improvisar; el cambio de destino era lo mas prudente y no haber reservado alojamiento facilitaba mucho las cosas. En la parte occidental de nuestra piel de toro, las previsiones no tenían nada que ver… nubes y claros y buenas temperaturas nos aguardaban en Extremadura; las provincias de Ávila y Toledo parece que también tendrían tregua.
Otro vistazo a wikiloc y en breve teníamos alternativa: ruta por la provincia de Ávila, bordeando la parte norte de la Sierra de Gredos e intentar llegar a las Hurdes, en el norte de Cáceres.
La ruta a seguir por Ávila, iba a ser esta:
https://es.wikiloc.com/rutas-moto-trail ... 13-5739267
La haríamos en sentido inverso, comenzando en Las Navas del Marqués, ya en Ávila.
DIA 1. SABADO 26-09-2020.
Llegó el día y los tres jinetes con sus tres monturas, allí estaban, puntuales a su cita. Todas gordas pero bien avenidas…. Tiger 800, CRF 1000L y la 990 Adventure del que relata.
No he pegado ojo en toda la noche; como un niño chico en la víspera de Reyes... Nuestras ajetreadas vidas absorben nuestro poco tiempo libre y, por desgracia, este tipo de planes no están al orden del día, al menos para mí. Afortunados son los que puedan decir lo contrario.
Pero ya lo dice el refrán: "la sarna con gusto… ", y el madrugón y el sueño quedan rápido en el olvido gracias al Sol y una temperatura ideal para hacer off.
En ocasiones es conveniente guiarse por el cuerdo del grupo (que no soy yo…), pues más allá de Somosierra caían chuzos de punta… Mas que acertar, nos ha tocado la lotería.. Así que comenzamos la ruta, pero sin nada realmente destacable. El track tenía un par de puntos picantes en la zona de Navas del Marqués, que hizo que nos tuviéramos que emplear a fondo, pero el tramo desde La Cañada hasta Villatoro (aún en Ávila) va serpenteando con las nacionales CL 505 y N110A y lo cierto es que desmerece bastante.

Primeros tramos, cerca de Navas del Marqués.
Caminos anchos y polvorientos y mucho tráfico, pues al estar tan cerca de la carretera y de varias poblaciones, son frecuentes las huertas, cercas o casas de labor y por ende los paisanos con sus C15. En un cambio de rasante, a punto estoy de empotrarme contra un R-6 granate. Atisbo a través del parabrisas al paisano haciendo todo tipo de aspavientos y me pitan los oídos. Pero lo cierto es que éramos ambos los que íbamos más rápido de lo debido. No solo yo.

Cerca de Casas del Puerto, Ávila.
Nuestros estómagos empezaron a dar quejas a la altura de Piedrahita, coqueto pueblo a las faldas de Gredos, en cuya preciosa plaza mayor los calmamos un poco. A lo tonto habíamos consumido la mañana…; felices por el comienzo de la aventura, por las buenas condiciones y ausencia de imprevistos, pero un poco desencantados por lo monótono del track…
Pero a partir de Piedrahita la felicidad iba a ser plena; la ruta empieza a cambiar y ahora abundan los “single-track”, las veredas, los caminos empedrados y alguna zona más exigente.
Recorremos un tramo que me recuerda a nuestra madrileña “Colada de los gallegos” que tantas veces he bajado con la bici. El martilleo de los cantos contra el cubre-cárter de mi 990 me hace pensar en el insano maltrato al que sometemos a nuestras máquinas. Poco se rompen las pobres para el castigo que se llevan.
El paisaje también cambia: hay más vegetación y el terreno está más húmedo. Las condiciones para nuestro hobby no podían ser más perfectas.
Casi sin darnos cuenta pasamos Guijuelo, y aunque los días aún son extensos, el ocaso nos va dando alcance. Éxtasis. Rodar por una verde y estrecha vereda al caer el sol, lejos de cualquier atisbo de civilización, es algo impagable.
Pero se hace de noche y hay que buscar guarida.
No sabemos ni donde estamos, pero esto, en estos tiempos que corren, no supone el más mínimo problema gracias a la tecnología… La noche nos había atropellado cerca de un pueblo llamado Valbuena. Pero un vistazo a Booking y en menos que canta un gallo ya tenemos hotel en un pueblo cercano: Baños de Montemayor. Allí que nos dirigimos y en pocos minutos allí que caímos, ya en total oscuridad. Hotel Alegría. El nombre del modesto hotel venía que ni pintado…, curiosos los detalles que nos depara el guionista que dirige nuestros caminos.
El pueblo es muy bonito, puerta del valle de Ambroz, provincia de Cáceres, pero casi en el límite con Salamanca. Muy turístico gracias a su imponente balneario, aunque la pandemia está haciendo estragos y hay poco ambiente. Cenamos, por muy poco dinero, en uno de los escasos bares que estaban abiertos. Maldito bicho. No son las 23.00 y ya estamos acostados; estamos reventados y mañana el día promete: estamos a tiro de piedra de las Hurdes y hay muchas ganas de hacer el track, pues hemos leído que algunos foreros han hecho parte del mismo y hablan maravillas. Buenas referencias, y altas expectativas a tenor de los comentarios de la propia web de Wikiloc.

Posando junto a nuestras jabatas, tras un merecido descanso.
DIA 2. DOMINGO 27-09-2020.
Ruta:
https://es.wikiloc.com/rutas-moto-trail ... go-6655274
Amanece completamente tapado. Pero ojo, estamos a los pies de la sierra de Béjar y en cierto modo suponemos que aquí esto es lo habitual…. Cogemos la autovía de la Ruta de la Plata y según nos adentramos en la provincia de Cáceres y perdemos altura el cielo se va aclarando. Sol rotundo, un día mas, no se puede pedir más.
Por carretera llegamos a Granadilla, antiguo señorío de Granada (de ahí su nombre, claro). Fue una villa amurallada fundada por los árabes hace más de 1000 años. A causa de la construcción del embalse Gabriel y Galán, el pueblo fue desalojado en la década de los 50 y cayó en el olvido, quedando completamente abandonado. Pero a veces nuestros gobernantes hacen bien algunas cosas y el pueblo, habitado solo por estudiantes, está en proceso de restauración, por lo que bien merecía una visita, aunque tuviera que ser breve. Nos quedamos con las ganas de subir a la torre, cerrada por el dichoso bicho chino. Las vistas desde allí arriba deben ser espectaculares.

Granadilla, Cáceres.
El track es una excursión de varios días y solo teníamos unas pocas horas para rodar. Así que decidimos empezar la excursión off-road precisamente en Granadilla y tirar hasta que sonase el toque de queda. Rutón. No hay otra palabra. Hicimos el “cuerno” que podríamos decir que dibuja la ruta en su parte noreste. Rodamos desde Granadilla hasta Muñomoral, que fue donde nos aviso el dichoso timbre del recreo...

Primeros tramos de la ruta, ya en Las Hurdes.
Este tramo es muy sencillo. Podríamos decir que es muy parecido a los tracks que tenemos por El Atazar, Pantano de El Vado, etc… pero en plan “bruto”, con muchos kms, paisajes espectaculares y sin cruzarte con ningún ser humano en muchos kilómetros. Bichos, por el contrario, sí que había: un par de familias de corzos huyeron a nuestro molesto paso.
Caminos forestales anchos, y sin desniveles. A alguno le puede parecer aburrido, pero solo por los paisajes es imposible tener tal opinión. El clímax a nivel de paisaje llega cuando te acercas al Meandro del Melero, al que se sube por una pista, esta sí, bastante concurrida de senderistas y paseantes. Pero toda vez lo dejas atrás se vuelve a una soledad total.

Meandro del Melero, Las Hurdes. Justo es el limite entre las provincias de Cáceres y Salamanca.

La 990 también quiere chupar cámara en un sitio así.
A eso de las 15:00 horas, para agilizar el asunto, tocaba bocata al sol junto al río Hurdano. No podía ser de otra manera, esta comarca es tierra de buenos embutidos y mejores jamones. Tras un breve descanso “carretera y manta” hasta Madrid, con alguna breve parada para los cafés, dado que vamos bien de tiempo.
Antes de que caiga la noche hemos llegado sanos y salvos a la capital, con una sonrisa de oreja a oreja y cavilando para la próxima, que esperemos sea pronto.
Video de la excursión:
https://www.youtube.com/watch?v=URN93IKCTL4&t=8s
Saludos y gracias si has llegado hasta aqui!!!
